Guasave, Sin.- El Sindicato Único de Trabajadores Académicos y Administrativos de la Universidad Autónoma de Occidente (UAdeO) advirtió que el movimiento de huelga de hambre no se levantará hasta que el rector atienda personalmente sus demandas y se reinstale al trabajador despedido, a quien consideran separado de su cargo de manera injustificada. “Ya investigamos y no hay una causal directa para el despido. Es una decisión radical por parte de la autoridad”, aseguró el secretario general, Raúl Portillo Molina.
El dirigente sindical señaló que han buscado el diálogo desde el primer momento, pero la negativa de la administración universitaria los obligó a tomar esta medida. “Esta huelga de brazos caídos no es una acción que tomamos a la ligera, pero no nos dejaron otra opción. Seguimos dispuestos a dialogar, pero mientras no haya reinstalación, no hay marcha atrás”, advirtió.
Portillo Molina indicó que ya se presentó un oficio formal al rector, donde exigen la reinstalación inmediata del trabajador, el pago de salarios caídos y el respeto pleno a sus derechos laborales y civiles. “Este documento será entregado mañana, con firma oficial. No es una solicitud más: es una exigencia con respaldo legal y moral”, enfatizó.
El sindicato cuenta con el apoyo de docentes, personal administrativo y abogados, quienes se han sumado al movimiento desde el primer momento. Aseguran que no se trata de una disputa política o sindical, sino de una acción en defensa de los principios de justicia laboral dentro de la universidad. “Nuestra lucha es por la institución y por la dignidad de sus trabajadores”, señaló.
Finalmente, el líder sindical recalcó que la huelga es indefinida y que no cesará hasta que el rector dé la cara. “Queremos fortalecer nuestra universidad, pero no podemos permitir decisiones arbitrarias. Si no hay reinstalación, seguiremos aquí. El movimiento termina cuando haya justicia”, concluyó.
